4/25/2008

Guerras monopólicas


En varios foros como reuniones de la OCDE se habla de que México es como Estados Unidos a finales del siglo XIX cuando los grandes monopolios dominaban la vida de ese país aquí un ejemplo de ello.
Aye fui a un evento de la CANITEC que la Cámara Nacional de la Industria de las Telecomunicaciones que básicamente agrupa a operadores de televisión por cable. A la comida asistió el presidente Felipe Calderón que además de su acostumbrada comitiva de seguridad entró acompañado de música de cámara que a su entrada tocó una piezas digna del alcalde de San José de las Manzanas, ¡ ah mi querido México siglo XVIII !. La asistencia del presidente al evento se da en el contexto de una ácida guerra que se libra entre la CANITEC y Telefónica por un lado y por otro Telmex que ha ayudado a Slim a convertirse en uno de los hombre más ricos del mundo.
Por una parte los cableros quieren empujar a la opinión pública para retardar el cambio al título de concesión de Telmex, dicho cambio le permitiría a la empresa telefónica ofrecer televisión por cable lo que la convertiría en un formidable oponente de los cableros de la CANITEC. Por otra parte Telefónica libra batallas con Telmex en toda Latinoamérica y también en México en donde busca obtener permiso para poder ofrecer telefonía fija. La alianza CANITEC Telefónica es inevitable. La guerra ya llegó a los medios masivos de comunicación, el consumidor observa en su pantalla de televisión y escucha en la radio como un gordito con acento regio invita a los competidores de Telmex a invertir en zonas no tan rentables, cínico y patético. La respuesta de Telefónica fue contratar al ex secretario Hacienda Francisco Gil Díaz como presidente para México y Centroamérica y cuya misión hasta ahora ha sido atacar de manera activa e inteligente a la empresa de Carlos Slim. Pocos como Francisco Gil Díaz se han atrevido a decir que Telmex es un estado dentro del estado o que había varios funcionarios del gobierno federal que fueron puestos directamente por la empresa de Carlos Slim. Aunque no menciona el nombre todos los que están cercanos al tema saben que se trata de Jorge Álvarez Hoth quien fue subsecretario de comunicaciones en el sexenio pasado. Los ataques de Gil Díaz serían muy loables si no los hiciera a nombre de Telefónica, una compañía que como cualquier otra al igual que Telmex busca impulsar su rentabilidad a toda costa incluso bloqueando a la competencia porque al igual que en México nos quejamos de Telmex en España se quejan de las altas tarifas que cobra Telefónica por el acceso a internet. A diferencia de la península ibérica el estado mexicano parece más débil para frenar a Telmex. Por ello el presidente Felipe Calderón omitió adoptar una postura de confrontación y es que además del poder político y fáctico de Telmex el jefe del ejecutivo no debe quedar atrapado en un pleito entre empresas. Lo lamentable es que el consumidor sigue siendo el factor con menos peso en la ecuación.

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